Cómo Pulpo Click se convirtió en su propio caso de éxito (y aprendizaje)
La mayoría de las historias de negocio empiezan cuando «todo sale bien».
La nuestra comenzó entre olas revueltas, tropiezos y verdades que dolieron.
Antes de ayudar a otros a ordenar su presencia digital, tuvimos que desenredar nuestros propios tentáculos.
Pulpo Click nació con un océano de ideas y sin brújula.
Pero con un faro claro:
“La estrategia digital debe ser humana, transparente y sin máscaras.”
¿El camino? Un viaje de autodescubrimiento. Hoy lo compartimos sin editar: cómo fuimos juntando cada tentáculo hasta encontrar nuestra propia voz.
🧠 Paso 1: Diagnóstico que nos confrontó
Como todo buen proceso Pulpo, empezamos por mirarnos al espejo.
Y el reflejo no era cómodo:
- ¿Qué somos cuando quitamos las etiquetas?
- ¿A quién le hablamos en realidad?
- ¿Por qué deberían elegirnos?
Las respuestas no llegaron en un día. Hubo borradores abandonados, dudas que pesaban y momentos de querer tirar la toalla, sentíamos que no avanzábamos.
Porque ver las grietas en el barco ajeno es fácil, pero aceptar tus propias grietas exige coraje.
Aprendimos a convivir con la incomodidad y seguir avanzando, incluso cuando el mar estaba en tensa calma.
🎯 Paso 2: De mil ideas a una propuesta con alma
Confesión incómoda: empezamos queriendo ser «los expertos en datos» 🤓
… y terminamos queriendo ser ser el oráculo que resuelve TODO (diseño, coaching, automatizaciones, ¡hasta horóscopos digitales!).
Resultado: Un pulpo exhausto, ahogado en sus propios tentáculos.
La solución fue aplicar lo que ahora predicamos:
- Enfocarnos en lo que realmente movía la aguja (y dejar lo demás).
- Hablar como humanos, no como manual de SEO.
- Crear el Diagnóstico Express (gratis) que nos hubiera salvado meses de caos.
🎯 Menos tecnicismo, más estrategia accionable.
🕸 Paso 3: La web que no nos reconocía
Nuestra primera web era como un traje prestado: bonito, pero no nuestro.
No transmitía nuestra esencia, nuestro ritmo, nuestro humor. Solo era… un sitio más en el mar digital 🫠
El click vino cuando entendimos:
«Si no te representa, no es tuyo. Y si no es tuyo, no sirve.».
Así que… borrón y página nueva. Y ahora pulpoclick.com es el fiel reflejo de nuestro ADN:
- Textos que suenan a nosotros (no a chatbot corporativo).
- Visuales que muestran nuestra personalidad submarina.
- Estructura clara como predicamos a nuestros clientes.
📣 Paso 4: Salir a la superficie (con miedo y todo)
El paso más difícil: mostrarnos al mundo como éramos.
Aunque sabíamos del tema, el síndrome del impostor gritaba:
- «¿Y si nos ven como amateur?»
- «¿Y si nadie responde?»
Pero publicamos igual.
Hablamos con nuestra voz torpe y auténtica. Nos equivocamos en vivo. Aprendimos a nadar en público.
🌊 ¿Hoy? Un faro en construcción
No te mentiremos: seguimos aprendiendo con cada ola. Pero con libertad para equivocarnos y celebrar lo logrado:
Claridad: Ya no ofrecemos todo, sino lo que sabemos transformar.
Progreso: Cada cliente que dice «esto es justo lo que necesitaba» nos refuerza el propósito.
Empatía radical: Sentimos en carne propia tus mismas batallas digitales.
💬 Por qué te lo contamos
Porque el marketing vende atajos con finales felices.
Nosotros elegimos mostrar el proceso real:
Las noches en vela, las ideas descartadas, los miedos y los pequeños triunfos.
En Pulpo Click no hay fórmulas mágicas.
Hay un equipo que estuvo en tu lugar y te acompaña para que construyas desde lo que tu eres.
🐙 Bonus: Si leíste hasta aquí…
Ya eres parte de nuestra manada de pulpos. Y si quieres empezar a ordenar tu presencia digital:
